fbpx

Ángel María

Al igual que ocurre en nuestra vida, las «dietas milagrosas» nos dan una solución rápida, pero efímera. Dedícate a descubrir qué no está funcionando o no estás haciendo bien, para aplicar los recursos y herramientas que te ayuden a desprenderte de lo que te sobra, para siempre.

¿Cuántas «dietas milagro» conoces?

Cada cierto tiempo, alguien te habla de una dieta maravillosa y eficaz, con la que pierdes los kilos que te sobran rápidamente.

Además, son las que hacen determinados famosos, que eso, sin duda, es una garantía de éxito absoluto.

Y como ya hemos abandonado la intención de llevar una dieta equilibrada siempre, nos apuntamos al remedio inmediato que va a deshacer en 21 días, lo que hemos estado haciendo mal durante años.

¿Y funciona?

Solución rápida, pero efímera…

¡Pues claro! Mira a «fulanito», que es portada de tal revista, lo bien que se ha quedado. O a mi amiga «melanita», que la vi el otro día tan delgadita.

Sí, son remedios rápidos y eficaces en muy poco tiempo, pero también efímeros. Porque no puedes estar mucho tiempo aplicando esas dietas, ya que además de kilos, también te quitan energía, vitaminas, hidratos y otros nutrientes necesarios para tu organismo.

Por tanto, cuando has conseguido el objetivo que te has marcado, vuelves a lo de antes; a comer mal. Y además, lo haces con el beneplácito de «ahora me lo puedo permitir, porque he perdido peso».

¿Y qué pasa después?

Que te encuentras, de repente, todos esos kilos que habías perdido. Es lo que tienen las soluciones rápidas y efímeras.

¡Uf! ¡Vaya fiasco! Pues va a ser que esta «dieta milagro» no ha funcionado tan bien como esperaba. 

Aunque, no pasa nada, porque dentro de un tiempo, cuando vuelves a sentirte mal y la ropa ya no te cabe, seguro que te hablarán de otra súper dieta, que esta sí que sí, funciona.

Las dietas milagro que aplicas en tu vida

Esta es una analogía de lo que hacemos con nuestra vida.

No nos gusta cómo la estamos viviendo. Empieza a apretarnos, a venirnos pequeña. 

Nos miramos al espejo y no nos gustamos. A veces, miramos para otro lado o hacemos algo que, al menos, nos turbe la visión, nos distraiga y nos ayude a olvidar que no es así como nos gustaría vernos, como nos gustaría estar.

Pero entonces, nos hablan de un método, de un gurú, de una fórmula, de un libro…, de algo que habla de cómo convertirte en la mejor versión de ti mismo, en cómo vivir a tope, en cómo hacerte millonario, en cómo visualizar y lograr tus sueños…

Y hay algunos métodos que funcionan, al igual que las dietas, sí, pero ni los unos ni los otros son «milagro».

Desconfía de aquello que te digan que es una fórmula mágica, que moviendo una varita y diciendo chibiricú – chibiracá, va a concederte lo que deseas.  (Y si encuentras esa varita, dime dónde está, por favor).

De lo que se trata es de aprender los recursos y herramientas que te ayuden a ser protagonista de tu vida. Que te muestren el camino que quieres seguir, que te lleve a vivir la vida que realmente deseas y mereces.

Pero eres tú quien debe caminar. Quien tiene que tomar acción. Quien tome las riendas de tu vida.

Si no, te pasará igual que con las «dietas milagro». Estarás durante un tiempo creyendo que funciona, viendo cómo te libras de eso que te sobra, viendo esos resultados, aparentemente positivos que te brinda, pero… ¿hasta cuándo? 

¿Hasta que vuelves a la actitud pasiva? ¿Hasta que retomas malos hábitos? ¿Hasta que unos dejan de decirte lo que tienes que hacer, para volver a escuchar lo que te dicen otros?

Piensa, decide y actúa en base a quién tú eres en realidad

Mientras sigas viviendo la vida que otros diseñan para ti, seguirás haciendo «dietas milagrosas» que no perduran.

Tienes que saber y reconocer qué es bueno para ti, qué necesitas, qué te hace feliz, cuál es tu propósito.

Así, cuando lo descubras, sabrás qué camino escoger y tendrás que ponerte en camino, tomar acción para transitarlo, para disfrutar cada día.

Y si te equivocas, sabrás dónde y por qué lo has hecho, porque serás consciente de quién eres y dónde estás. 

Sabrás que ha sido tu decisión y lo que puedes aprender de ella, para poder seguir caminando en la dirección que marca tu propósito, y no en la que otros deciden que es mejor para ti. 

El único milagro posible es el que consigues tomando las riendas de tu vida, descubriendo tu propósito y poniéndolo en acción.

Ángel María
Ángel María

Emprendedor orientado a Propósito, fundador de proyectos como Medios y Redes, Influenzia, Bubok, Iniciador o Leemur. Calificado por Forbes como una de las 100 personas más creativas del mundo de los negocios. Ayudo a personas y organizaciones a identificar su Propósito Transformador.